Experiencias de la Comunidad de Cantel

Inserita il: 05/10/2015

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Algunas experiencias vividas en nuestras comunidades en estos últimos meses

Comunidad de Cantel

Con Jesús y María visitamos las familias

Con motivo de la visita del Papa Francisco y en preparación para la Fiesta de la Virgen de la Caridad del Cobre, Madre y patrona de Cuba, hemos iniciado la visita a las familias con la imagen de la Virgen de la Caridad en Cantel, y la imagen del Sagrado Corazón de Jesús en Camarioca, pasando casa por casa.

Nos da mucha alegría porque son los laicos, que forman parte del equipo de misión, quienes están llevando adelante estas visitas, dejando por un día el cuadro de la Virgin en las casas, acompañado por la oración por la visita del Papa y un tríptico que explica quién es el Papa. Es muy valiosa la colaboración y ya vemos estos frutos que nos llenan de esperanza.

En Cantel las familias reciben con agrado a la Virgen, aún familias que no manifestaban una creencia particular, ya que la Virgen de la Caridad es madre de todos los cubanos. Es la madre que sale al encuentro de sus hijos, seguramente escuchará y presentará sus peticiones a su Hijo.

En Camarioca la vivencia es similar, acogen con mucho cariño la imagen del Sagrado Corazón, y el Señor ciertamente muestra su cercanía a los que están más alejados y necesitados de su amor de Buen Pastor.

Damos gracias a Dios por este tiempo de gracia y confiamos sus frutos al Señor, que obra en los corazones y en la vida de las personas como Él quiere.

Peregrinación de la misericordia

En nuestras comunidades de Cantel y Varadero, preparándonos para la visita del Papa Francisco, ‘Misionero de la Misericordia’ ”, haciéndonos eco de una invitación que los Obispos cubanos escribieran “a los hijos de la Iglesia Católica, a los hermanos de otras confesiones religiosas, y a todo nuestro pueblo”, a vivir este tiempo poniendo en práctica la misericordia; con el Consejo Pastoral hemos programado para el primer viernes de agosto una peregrinación a la Capilla de Camarioca, que está dedicada precisamente al Sagrado Corazón de Jesús: una procesión desde la entrada del pueblo, presididos por la cruz y con nuestras Biblias en la mano, deteniéndonos en tres estaciones, para meditar la Palabra de Dios y escuchar las enseñanzas del Papa en su encíclica La alegría del Evangelio. La invitación era rezar para que en el corazón de todos los cubamos se abra un espacio a la esperanza, al amor fraterno y a la comunidad.

En la primera estación, frente a la escuela, en torno a la expresión “¡No nos dejemos robar la esperanza!” (EG 86), rezamos por los niños, adolescentes, jóvenes, profesores, autoridades educativas… pidiendo que en la tarea docente se inspiren en criterios de sabiduría, sembrando las virtudes y los valores que engrandecen al ser humano.

En la segunda estación, frente al Policlínico y a las tiendas del pueblo, en torno a la expresión “¡No nos dejemos robar el amor fraterno!” (EG 101), rezamos por los enfermos, médicos, familiares, trabajadores, campesinos… pidiendo por la defensa de la vida, la dignificación del trabajo, la reconciliación y la paz.

En la tercera estación, llegando a la Capilla, en torno a la expresión “¡No nos dejemos robar la comunidad!” (EG 92), rezamos por las familias, por nuestras comunidades cristianas y por los que luchan por un mundo más humano y más fraterno, que se sientan acompañados por la fuerza de Dios y por el apoyo y la solidaridad de los hermanos.

Llegando a la Capilla, luego de unos minutos de descanso, continuamos con una celebración penitencial y confesiones, para finalizar con la celebración Eucaristística.

Comenzamos a las 8.00 de la mañana y concluimos a la 1.00 de la tarde. Fue una mañana completa vivida en una profunda manifestación pública de fe. Participaron más de 100 personas, una grande y maravillosa sorpresa, todos agradecían y expresaban su alegría por esta posibilidad de peregrinar, rezar, vivir juntos una experiencia fuerte de fe, sentirse comunidad viva. Entre los participantes había gente que habitualmente no participa en la Iglesia, pero esta celebración sí les atrajo… es que hacía muchos años que no se realizaba una procesión por las calles como manifestación de fe, y se sintieron motivados.

También nuestro Obispo, Mons. Manuel de Céspedes, nos acompañó desde el inicio de la peregrinación, caminando con nosotros, confesando y presidiendo la Eucaristía, con un testimonio fuerte de cercanía y contacto con la gente, como es su estilo de pastor. Por supuesto, nuestro párroco, el P. Jesús Marcoleta estuvo también presente, animando los distintos momentos de la celebración.

Todo concluyó con una rica merienda preparada y ofrecida por la comunidad de Camarioca. Hemos agradecido tanto al Señor por inspirarnos y motivarnos en animar esta celebración.

Fiesta de la Caridad

Nos preparamos para nuestra fiesta patronal en el contexto de la preparación para la visita del Papa Francisco. Todo comenzó con el envío de las misioneras que llevaron la imagen de la Virgen de la Caridad a visitar las familias, casa por casa, desde el primer domingo de agosto. El 30 de agosto se inició el rezo de la novena, en nueve centros, abarcando gran parte del radio parroquial, animada por algunos laicos y por las Hermanas. La novena invitaba a reflexionar sobre las obras de misericordia, un tema que algunos recordaban pero muchos ignoraban; un buen comienzo también para el Año de la Misericordia. El día de la fiesta, el 8 de septiembre, la Misa presidida por el P. Jesús Marcoleta, nuestro párroco, se celebró en el templo parroquial a las 20.00 horas.

Hemos percibido un clima diferente en esta fiesta, más participación de la gente, tanto en número como en el silencio y el recogimiento manifestados en la celebración de la Misa. Probablemente lo que más movió a las personas es la visita de la Virgen a las familias. Solamente no la han aceptado algunas pocas familias que practican otra religión; las personas la piden, se emocionan al recibirla. Podemos comprobar cómo la Virgen se abre paso y lleva a su Hijo Jesús con ella, y pasa bendiciendo las familias. La Virgen de la Caridad es la madre de todos los cubanos, un símbolo de cubanía además.

Visita del Papa Francisco

¿Qué decir de la visita del Papa Francisco? Cuba está familiarizada con los ciclones, y muchos están describiendo el paso de Francisco por Cuba como un “ciclón de misericordia”. Su mirada, sus palabras, sus gestos, no han pasado desapercibidos para la inmensa mayoría de los cubanos. Muchas personas que se declaran no creyentes quedaron sorprendidas, en particular de su universalidad – no excluye a nadie en su mensaje – lo admiran ¡y hasta rezan por él!

De nuestras comunidades parroquiales lamentablemente, por motivos varios, han peregrinado pocas personas para estar presente en la celebración de La Habana. Por nuestra comunidad, lo hemos hecho las Hnas. Aurelia y Alicia, que participamos de la Misa en la plaza de la Revolución, y luego de las Vísperas con los consagrados en la Catedral, siempre en La Habana.

Hna. Alicia también peregrinó, junto a un grupo de 50 misioneros de nuestra Diócesis, al Santuario de la Virgen de la Caridad de El Cobre, al otro extremo de la isla. Fue una hermosa experiencia, un largo viaje que nos permitió conocernos y relacionarnos más entre misioneros, y luego celebrar con el Papa en la Casa de la Madre de todos los cubanos. Por la importancia que tiene la pastoral misionera en la evangelización de la Iglesia cubana, con sus casas-misión y sus animadores, los Obispos han querido que el Papa celebrara con los misioneros; estaban presentes todas las Diócesis con una delegación de 50 misioneros cada una. ¡Fue una verdadera fiesta!

De manera inédita, la televisión cubana transmitió íntegramente todas las celebraciones, encuentros, intervenciones del Papa, tarea que llevó adelante un grupo de periodistas bien preparados y con los comentarios excelentes – una verdadera catequesis – de un sacerdote cubano, que comentaba todo cuanto era transmitido. No hubo cubano que no pudiera, si lo quería, escuchar su mensaje. La inmensa mayoría de la población siguió todo por televisión.

Ahora, poco a poco, el gran desafío es no dejar caer en el olvido el mensaje del Papa. La Iglesia tendrá como tarea recoger los discursos, homilías, mensajes, y hasta los mismos gestos de Francisco, para comentarlos, profundizarlos, proponer pistas concretas para asumir y vivir en la cotidianidad. Creemos que el mayor empeño estará en la reconciliación y la evangelización de la familia.

Por todo: ¡GRACIAS JESÚS BUEN PASTOR! ¡GRACIAS VIRGENCITA DE LA CARIDAD!

Hnas. Chiara, Aurelia, Alicia

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maria rosa barison

21/10/2015 | 23:02

Piccoli passi,segni di speranza che porteranno sicuramente frutti abbondanti... Il Signore benedica voi e il popolo che ha affidato alla vostra cura. Un grande abbraccio.

sister Estelita(Australia)

19/10/2015 | 11:18

May our Lady continue to protect and intercede for your people. A nice preparation of fiesta for Mother Mary, congratulations dear sisters.

Edit Ana Fassano

13/10/2015 | 03:32

Bendito sea Dios por las maravillas que esta obrando en Cuba y en cada uno de ustedes. Jesús Buen Pastor las fortalezca en esta hermosa misión y unidas siempre en él . mucho cariño y bendiciones

Albina Bosio

06/10/2015 | 14:44

Hermanas Felicitaciones por estas iniciativas. Que Dios continue bendiciendolas. Um grande abrazo.